viernes, 20 de enero de 2023

Festina Lente - Informe de Rendición de Cuentas Nº1

Este primer informe como Designado de Presidencia ante el CS-UIS se centrará en mi abstención frente a cinco Acuerdos discutidos y aprobados en sesión ordinaria del 12 de diciembre de 2022. De inicio, es necesario aclarar que recibí el orden del día, con los documentos soporte, la noche del 5 de diciembre. Menos de siete días insuficientes para analizar con responsable profundidad la información y los datos financieros allegados. Razón principal de mi abstención. No obstante, existieron otras motivaciones -que expondré a continuación-, originadas de las percepciones recogidas en reunión con representantes profesorales, sindicales, estudiantiles y egresados (Ver entrada anterior), además de una lectura exprés.

En relación con el Programa de Gestión Institucional -PGI-, para el año 2023, hice reparos a especificidades de cuatro enfoques estratégicos de la Universidad: investigación e innovación, democratización del conocimiento, construcción de comunidad y gestión universitaria.

Sobre las Spin-off (investigación e innovación), creadas o reconocidas, aduje que desde la aprobación del respectivo Acuerdo existía un desconocimiento del avance en su implementación. Solicité, así, para la próxima sesión, una exposición detallada sobre este tema, donde se definiera la línea base y las acciones concretas con un cronograma de hitos.

La formación pertinente para la región hace parte del enfoque democratización del conocimiento. Mi argumento se dirigió hacia la inexistencia de acciones concretas con la comunidad para aperturar programas pertinentes en las regiones. En este aspecto pareciera replicarse la práctica educacional que Paulo Freire denominó educación bancaria. No hay evidencia, en el PGI, que los programas regionales sean creados desde las necesidades y problemáticas de cada comunidad. Tampoco se evidencian, por ejemplo, soluciones basadas en la naturaleza (SBN) ni intenciones de establecer gobernanza en torno al agua (parte de las transformaciones propuestas en el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026), donde la Universidad sea el punto metodológico de articulación entre ciencia y comunidad, a pesar de los más de diez ríos que irrigan el Departamento. 

Además de lo anterior, y según el diálogo sostenido con representantes docentes, los programas aperturados en las sedes regionales carecen de una planta profesoral con mínimos requerimientos de calidad. La figura contractual predominante para suplir las necesidades del servicio docente es la del Tutor Ipred. Un asunto no menor dadas las condiciones de precariedad generadas con este tipo de vinculación laboral.

Afirmé que en la práctica, en lo pertinente a construcción de comunidad y gestión universitaria, existía una contradicción respecto al enfoque democratización del saber. Si bien consideraba importante la apuesta mediática encaminada a la celebración de los 75 años de la Universidad, veía con preocupación la incomunicación entre bases profesorales y Rectoría. Me referí al comunicado de la Asociación de Profesores -ASPROUIS-, del 19 de noviembre, cuyo contenido demostraba el deterioro de los canales de comunicación entre los mencionados. Por tanto, era necesario rescatar el diálogo al interior de la Universidad para garantizar la cohesión social y la construcción de comunidad, tal como establece uno de los enfoques estratégicos del PDI 2019-2030. De ahí mi propuesta de los Consejos Ampliados, a fin de implementar un diálogo universitario. Debemos escucharnos. Escuchar a todas y a todos, quienes somos y hacemos UIS.

Frente a mi abstención de aprobar el Presupuesto de Ingresos y Egresos para la vigencia fiscal del año 2023, solicité de manera respetuosa dos informes. El primero, sobre el recaudo e inversiones realizadas de las estampillas Pro UIS -por componentes y proyectos asociados a cada uno de ellos- y Pro Unal, de acuerdo con los objetivos de inversión. El otro informe solicitado tiene que ver con los gastos y proyectos financiados con vigencias futuras, incluyendo proyecciones financieras.

También me abstuve de aprobar autorización al Rector para que mediante resolución modificara el Presupuesto General de Ingresos y Gastos de Funcionamiento e Inversión junto con los capítulos independientes al presupuesto de la UIS, correspondiente al cierre de la vigencia fiscal 2022 y al inicio de la vigencia fiscal 2023. Añadí a mi justificación inicial la poca claridad y las dudas frente al tema.

Mi abstención para aprobar la planta de personal de la UIS para el año 2023 tuvo dos razones adicionales. Primero, las modificaciones propuestas a la Unidad de Servicios Especializados de Salud (UISALUD) no se justificaron con suficiencia. La transformación de un cargo de Coordinador de Salud en Subdirector Médico y la creación de un cargo de Subdirector Administrativo y Financiero se intentaron relacionar con el objetivo misional de UISALUD y con la promoción de conductas saludables y de prevención de enfermedades. Sin embargo, no se demuestra claramente la incidencia directa de estos cambios de personal sobre los programas de promoción y prevención. Es más, este aspecto no se mencionó en la exposición de motivos presentada ante el CS; sí el de la sobrecarga laboral, que no aparece en los documentos allegados para su estudio y aprobación.

La segunda razón, la ausencia de un interés concreto por disminuir los niveles de precarización laboral docente. A primer semestre del año 2022, según la Unidad de Información y Análisis Estadístico de la UIS, UIAES, el 74% del profesorado de la Universidad corresponde a docentes cátedra, es decir, 1.481 profesoras y profesores fueron contratados de manera provisional frente a un 26%, 515 docentes, con nombramiento de planta. Cifra que no ha variado significativamente desde hace cuatro años, como se demuestra en el estudio de caracterización realizado en el año 2019. De paso, cabe recordar que éste estudio facilitaría “... la toma decisiones frente a las propuestas y peticiones presentadas por los docentes de cátedra a través de [...] ASPU-UIS y [...] ASPROUIS [para] establecer acciones concretas a partir del año académico 2020.” De este proceso surge la Comisión de Dignificación, a la cual pertenecí entre diciembre de 2019 y septiembre de 2020. Luego de dos años no se observan avances en éste sentido, tanto así que en los documentos allegados a los miembros del CS no hay referencia al trabajo adelantado por dicha Comisión, cuyo tema principal era la dignificación y formalización docente.

Antes de terminar este primer informe, es importante aclarar que di mi voto favorable a tres puntos del orden del día. Primero, a la Política de Salud Mental; también, a las disposiciones en materia disciplinaria sobre hechos de violencia y discriminación basados en género; por último, estuve de acuerdo con aprobar el número de cupos para el disfrute del Año Sabático, año 2023.

Finalmente, es necesario indicar que la próxima sesión del CS está programada para el lunes 30 de enero del 2023.

Informe 26 de Junio de 2024

 Informe público de mi gestión como Designado de Presidencia ante el CS UIS correspondiente a la sesión de Consejo Ampliado, realizada en la...